Servicios de perforación
Los contratistas remontan tras la pandemia
Una vez que la industria minera superó las estrictas cuarentenas que se impusieron con la pandemia, la actividad de exploración remontó. Según datos del Ministerio de Energía y Minas (MINEM), las inversiones en exploración minera en 2021 sumaron US$327 millones, lo que supuso un incremento del 51.5% con respecto a 2020 (US$216 millones). Aunque estas cifras siguen estando muy por debajo del anterior ciclo alto de los metales de hace una década, la demanda de servicios de perforación ha sido razonablemente robusta y hoy el nivel de actividad y los márgenes de varias compañías de perforación han vuelto a niveles pre-pandémicos.
Jorge Granda, director de operaciones en Perú de AK Drilling International (AKD), atribuye sus buenos resultados de 2021 al crecimiento en el segmento de las empresas júnior, principalmente. “A pesar de las dificultades en Perú relacionadas con los permisos y las comunidades, el grueso de nuestros clientes tomó coraje para seguir adelante y pudo destrabar sus problemas”, comenta, aunque también destaca que la empresa se ha consolidado en la gran minería.
Entretanto, Miguel Ángel Arenas, gerente general de Geotec, revela que la compañía que dirige no está trabajando con compañías júnior, sino que su cuota principal de mercado está en las grandes compañías mineras como Las Bambas, Antapaccay, Yanacocha y Quellaveco.
Ante la renovada demanda en el mercado, una nueva empresa se ha consolidado en el segmento de la perforación en el Perú. Se trata de Sierra Drilling, creada con el objetivo de brindar servicios de perforación diamantina, geotecnia y consultoría, y que inició actividades a finales del año pasado. En enero de 2022, Sierra Drilling ganó la licitación para la realización de perforaciones en Inmaculada de Hochschild Mining. “Hoy estamos operando allí con 11 máquinas de perforación tanto en interior mina como en superficie”, comenta Ian Venero, gerente general de la compañía.
Otro jugador que ha resurgido en el ámbito de la perforación en el Perú tras la pandemia ha sido Energold, empresa de origen canadiense pionera en introducir equipos portátiles en el país. La compañía, con 20 años de experiencia en Perú, pasó por un proceso de reestructuración a nivel corporativo recientemente. Enfocada principalmente en proyectos greenfield, ha trabajado en 2021 con clientes júnior como Palamina y Eloro, en los proyectos Usicayos y Victoria, respectivamente.
A pesar de los altos niveles de demanda que han prevalecido durante el último año y que han brindado grandes oportunidades a los contratistas de perforación, la industria está sufriendo una importante limitación. ”Hoy en día no hay suficientes perforistas para atender toda la demanda. El principal cuello de botella que estamos sufriendo es la formación y capacitación de gente, ya que cuando hay altos niveles de exploración, muchos tienden a irse a países como Surinam o Zambia a buscar nuevas oportunidades”, explica Arenas de Geotec.
Considerando la actual dificultad de captar y formar perforistas, compañías como Geotec ven una gran oportunidad y una tendencia a largo plazo en la automatización de las perforadoras y los equipos de apoyo, que lleva a operaciones menos riesgosas y complejas. Arenas asevera que la automatización de los equipos de perforación ha evolucionado mucho en los últimos años, pero todavía queda mucho camino por recorrer. Entre los equipos automatizados que utiliza la compañía se encuentran las máquinas Smart de Epiroc, que permiten programar el equipo e indicarle cómo perforar. Si el taladro se empieza a bloquear, se puede indicar a la máquina que retroceda y que vuelva a tomar impulso con los parámetros necesarios. “Este tipo de máquinas están marcando la pauta hacia la automatización, y nosotros pensamos que hoy en día la perforación debería ser 100% manos libres en todas las minas”, comenta.
”Contamos con un sistema de equipos que son portátiles, pero no por ello pierden competitividad o potencia. Estos equipos son capaces de operar en zonas sin acceso por carretera y terrenos en los que los taladros convencionales presentan dificultades, ya que se pueden transportar por trochas o a través de helicópteros, mulas, o personal de carga”.
Edgardo Laura, Gerente General, Energold Perú
Aunque la automatización puede traer importantes ventajas, Jorge Granda de AKD defiende que el componente humano es imprescindible para lograr los objetivos establecidos por los clientes. Para mantener un equipo humano altamente capacitado en medio de una escasez generalizada de trabajadores, la estrategia de AKD ha sido rechazar todos los proyectos que persigan exclusivamente lo “bueno, bonito y barato”, y así poder pagar salarios justos a los empleados. Esto, según Granda, ha creado mucha lealtad entre los trabajadores hacia la compañía.
Ian Venero de Sierra Drilling coincide en la importancia del componente humano en la perforación: “Se está avanzando progresivamente hacia la automatización, si bien hasta ahora la tecnología no ha conseguido suplir al operador. Este sigue siendo el conocedor de la perforación, y por el momento no existe ninguna tecnología que pueda llegar a los objetivos de los clientes sin desviarse y sin tener fallas”.
Mirando hacia el futuro, la perspectiva para los proveedores de servicios de perforación es moderadamente optimista. Según predicciones del MINEM, las inversiones en exploración podrían crecer ligeramente para finales de 2022 con respecto a 2021, pero seguirían estando lejos de los US$541 millones de 2019. Por diversos motivos, las inversiones en exploración han venido decreciendo de manera constante durante la última década.
Algunas razones para este descenso incluyen, en primer lugar, que la regulación ambiental en Perú está limitando severamente la exploración grassroots, ya que obtener permisos de perforación puede tardar hasta dos años. En segundo lugar, cada vez es más difícil encontrar grandes depósitos. A pesar del enorme potencial geológico del Perú, los grandes yacimientos más “visibles” y “fáciles” ya están identificados, sobre todo los auríferos, al punto de que algunos ejecutivos consideran que el siguiente paso debe ser la búsqueda de depósitos ciegos, en lugares donde no hay afloramientos.
Ante este panorama, cada vez se necesitan mejores herramientas para la exploración, y las nuevas tecnologías están jugando un papel muy importante para superar las crecientes dificultades técnicas y aprovechar al máximo cada dólar disponible.
En este sentido, Geotec ha realizado inversiones sustanciales en el último año: “Hemos adquirido de Canadá la máquina más grande de perforación de agua de la región, la Foremost DR-24 XHD. El equipo alcanza 500 metros de profundidad con un diámetro de 27.5 pulgadas utilizando el sistema de perforación dual, el cual nos permite revestir en simultáneo con la perforación dual rotary”, explica Arenas.
Imagen cortesía de Geotec